Septiembre: mes de los grandes propósitos. Enero no tiene nada que hacer al lado de septiembre…Debería comerme las uvas el 31 de agosto. Además de que están en plena vendimia, en enero no me propongo casi nada. Tengo que ir al gimnasio.  Necesito a alguien que vaya conmigo, si no, sé que no voy a ir ni de broma. Cojo el teléfono….

En el mundo empresarial, las compañías están formadas por personas que necesitan la misma fuerza de las alianzas, y saben que el objetivo es lo suficientemente trascendente y necesario como para que se difumine o pierda fuerza. Nadie puede mantener el mismo nivel de empuje o energía eternamente, pero todos quieren liderar un cambio positivo y ambicioso. Esto es exactamente lo que ha sido recogido en la Agenda 2030 por la ONU, y que se ha enmarcado en 17 grandes retos que abarcan todos los ámbitos de actuación urgente de cara a garantizar una sociedad más equilibrada, saludable y sostenible.

Todas quieren formar parte de este cambio, pero hay tanto en juego, y es necesario un cambio tan estructural, que esta vez todos tenemos que remar en la misma dirección.

Algunos consejos para alianzas exitosas

Para provocar un cambio real, se deben crear grupos de trabajo multidisciplinares en las que las empresas, gobiernos e instituciones elaboren un proyecto 360º que incorpore acciones en distintos ámbitos y en el que todos estemos representados:

  • Se debe trabajar en la creación y desarrollo de un marco regulatorio estable, que defina las líneas de actuación, las obligaciones, el alcance y los límites de actuación.
  • Las instituciones deben estar alineadas, y de esta manera garantizar el derrumbamiento de las trabas burocráticas que tantas veces irrumpen, incluso en contra el mismito sentido común.
  • Se debe apoyar desde las empresas y las instituciones, tanto económica como humanamente, el fomento de la innovación tecnológica, ya que la tecnología, ahora más que nunca, está al servicio de la sostenibilidad de la sociedad y del planeta.
  • Se deben impulsar campañas de sensibilización: las empresas no pueden plantear un cambio positivo, real y sostenible si éste no está respaldado por una necesidad y/o demanda del mercado.
  • Y por encima de todo, las empresas deben quitarse las gafas de competidores del mercado y empezar a mirarse como socios estratégicos para luchar juntos por un bien que va más allá de un business Plan.

No es pequeño el reto que tienen por delante. Muchas ya han empezado a levantar el teléfono. Algunas ya hasta se han puesto las zapatillas.

 

Macarena de la Figuera
Consultora Senior de RSC en LLORENTE&CUENCA
Licenciada en Comunicación y Master en RSC y Sostenibilidad (UNED-Universidad Jaume I de Castellón), tiene experiencia en la comunicación a nivel de Reputación Corporativa, RSC, Publicidad, Medios y RREE y puede trabajar en inglés, francés e italiano. Ha participado activamente en la construcción de relatos y en la identificación de mensajes estratégicos para clientes como Ribera del Duero, Rueda, Coca-Cola, L’Oreal, Cosentino y Acciona, entre otras. Se mueve con comodidad generando proyectos emblemáticos a través del diálogo y la escucha activa de los principales stakeholders. En los últimos once años ha desarrollado su carrera profesional en LLORENTE & CUENCA, Coca-Cola España, la agencia de publicidad McCann Erickson y la ONG Plan Internacional.